Anahi Turpin
¡HOLA! MI NOMBRE ES ANAHÍ TURPÍN Y… ¡SOY FOTÓGRAFA!
Hoy en día, hay muchísimos fotógrafos en cualquier rincón del planeta. Comuniones, bodas, conciertos, cumpleaños. embarazos, empresas, productos, todos los momentos considerados irrepetibles quedarán grabados de una forma u otra. El estilo del fotógrafo le aporta la respuesta a la pregunta: “¿de qué manera?”.
Yo considero que deben existir miles de fotógrafos. Millones. Tantos como personas hay en el mundo, con sus pequeños detalles diferenciadores. Así un fotógrafo sabrá captar la mejor pose de uno, y otro el momento; uno la belleza de la emoción y otro la emoción de la belleza, uno los pequeños detalles y otro los grandes…
Yo soy una de los miles de fotógrafos de este mundo y mis directrices como fotógrafo son las siguientes:
NO EXISTE NADIE FEO, O AL MENOS YO NO ME LO HE ENCONTRADO. SI ERES EL PRIMERO TE LO DIRÉ.
Por su puesto, que hay personas fotogénicas y otras que no lo son tanto, lo cual corresponde más a los estándares de belleza que a la propia belleza. Si quieres que te convierta en Madona lo haré, pero no te lo aconsejaré. Hay belleza en ti, lo sabes. Algún que otro día la has visto en el momento menos esperado, quizá cuando volviste de una tarde entre amig@s, puede que cuando saliste al baño a mitad de una película en el cine, a lo mejor fue nada más levantarte; pero sabes que ahí está, escondida en algún lugar misterioso.
Yo la encontraré para ti, para que siempre recuerdes la mejor versión de ti mismo, para que te observes bien y nunca vuelvas a olvidar lo que eres. Eres hermoso.
NUNCA TE PEDIRÉ QUE POSES.
Como mucho que te coloques en algún lugar determinado. La espera. la luz del entorno y tu propia luz harán el resto. Pasará la risa nerviosa, la cara tensa, las poses ( siempre las hay, no te preocupes, ese es un paso transitorio) y finalmente, cuando te empieces a acostumbrar al clic clic clic… ¡brillarás! Mientras piensas en lo que vas a hacer después, mientras hablamos, mientras alguien nos mira, en cualquier momento, lo veré y se quedará guardado para siempre.
Eso es todo, mis dos directrices, mi … ¿de qué manera?
